BURCHICK. Burger and Chicken.

Con la añoranza del pasado y recuperando un manjar de antaño, Burchick propone un nuevo concepto de restauración basado en una cocina rural.

Nuevos modelos de negocio y conceptos para restaurantes.El concepto.

Considerado durante años como plato exquisito de la buena mesa y de las ocasiones especiales, el pollo fue símbolo de lujo gastronómico y se convirtió en la comida tradicional de los domingos en las décadas de los 60, 70.

Momentos familiares y sabores que hoy recordamos con nostalgia, en busca de una vida apacible y saludable con estilo campestre, en un creciente entusiasmo por lo tradicional.

Basado en la especialización, Burchick propone una carta concisa y de calidad, dando relevancia al pollo asado tradicional y a los productos naturales.

El espacio.

Amanece un día cálido en el campo y el cobertizo nos transmite, poco a poco, la sensación de intensa canícula. De carácter curtido como su gente, el entorno abastece los materiales que componen un conjunto de apariencia quebradiza. Revestimiento de paja, techumbre de chapa y solado de barro cocido que nos conecta a la madre tierra.

Agradable como el mercado rural que aviva nuestros sentidos, la atmósfera se impregna de los matices de color que emanan los productos de la huerta. Una paleta cromática donde subyace el rojo intenso, el rojo corporativo, el rojo carnoso símbolo de ostentación de poderío que corona al presuntuoso gallo que despierta la naturaleza.

Los muebles, como los útiles del campo, son una herramienta más. Instrumentos sencillos de uso necesario para desarrollar las labores de diario. Enseres de rasgos puros, sólidos y metálicos.

Cordial como el talante de los campesinos, se intuye el restaurante. Un ambiente para la contemplación y la conversación. Un lugar para percibir la vida bucólica de los espacios campestres. Burchick nos invita a la celebración familiar de un domingo placentero junto a la mesa, contemplando la caída del sol.

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La creatividad desbordante del impulsor de una firma que abraza un mundo bizarro, Francisco Segarra, y la conciencia de que la generación de nuevos modelos de negocios basados en la calidad por encima de todo, es el camino al éxito comercial; se consolidan en forma de gran escenario.

Burchick, como parte de este acervo, es un concepto para restaurante que reivindica un plato tradicional. El pollo asado, vilipendiado por el consumo masivo, es un plato saludable y de prestigio en el pasado. El diseño del restaurante, asador, enaltece la forma de vida natural y junto a la percepción que tenemos de sus productos como saludables; le restituye crédito. Rememora las tradicionales reuniones familiares de los domingos alrededor de un delicioso pollo crujiente y humeante.

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