El puesto 33, una parada exótica en el mercado. La Pistachería.

La identidad y singularidad de una ciudad está en sus mercados. Te invitamos a sentir Madrid, a través de la personalidad y la autenticidad de un nuevo puesto en el mercado tradicional Antón Martín. La Pistachería, un espacio de lo más exótico que atesora las leyendas milenarias de una delicia llegada de Oriente Medio.

Tradición, historia y cultura de mercado.

Comienza el trasiego escaleras arriba y abajo, chirrían las persianas, llegan las primeras cajas de fruta, los cestos de pan y el pescado desde la lonja, algunas personas conversan y en el bar el café se toma cargado y bien caliente. Desde el amanecer, aún a puerta cerrada, el mercado guarda una gran actividad bajo su cúpula. Pronto, sus puestos y pasillos congregarán a vecinos que acuden al mercado casi a diario, ahora sí, con las primeras compras, los vendedores proclaman a voces la calidad de sus productos y las cestas se llenan. Se respira un aire general de vida que embriaga.

El mercado central es mucho más que un mercado, en sus calles reina la alegría, es un centro de abastecimiento y de encuentro vecinal, la gente se saluda, se relaciona y convive desde hace años. Antón Martín es un auténtico templo de culto al producto local, de proximidad y de calidad.

La Pistachería. Cuando el deleite llega de lugares lejanos.

Los frutos secos gourmet son una pequeña delicia gastronómica. Crudos, tostados, en polvo, en pasta, en aceite, en helados… el pistacho tratado con mimo y cuidado, al más puro estilo tradicional y artesanal es una auténtica delicatessen.

Diseñar un puesto de mercado tradicional, poner en valor la naturaleza del producto y reflejar la belleza de sus campos de cultivo, ha sido un nuevo reto para nuestro equipo de interiorismo de Madrid.

La Pistachería, una pequeña tienda de especialidades, un concepto de local de exposición y mucho amor por un producto sabroso y saludable.

Las referencias estéticas y los materiales del lugar de procedencia del pistacho inspiran este proyecto que se integra en el bullicio del mercado y destaca por su estilo único.

Luces que resaltan los detalles más exquisitos y muebles que exhiben un sabor dulce y delicado. Maderas con pátina trabajadas artesanalmente, paredes y techos imitando el adobe de las casas en las zonas más rurales, retroiluminados, celosías y mosaicos que aportan sofisticación y modernidad. El puesto 33 trae exotismo al mercado.


Diseño de tiendas gourmet: La Pistachería.
Proyecto comercial y equipamiento: Francisco Segarra.
Mobiliario comercial: Francisco Segarra.