Un decorado auténtico. Naturalidad y elegancia para una colaboración de altura.

Descubrir algunas de nuestras piezas en grandes escenografías de exitosos programas de televisión, es como dejar aflorar nuestra esencia más pura, nuestra parte intangible.
Francisco Segarra deja entrever su lado más sofisticado a través del mobiliario cedido para una colaboración de altura.

La escenografía elegida para esta nueva edición de MasterChef Celebrity encuentra su sentido en un ambiente retro de lo más glamuroso. Un decorado que une distinción, calidad, estilo y autenticidad.

La calidez y la intensidad del rojo se fusiona con la elegancia y la brillantez de los detalles dorados, un escenario de lo más seductor que combina texturas, colores y formas sinuosas a fin de lograr el lugar perfecto para una despedida.

Naturalidad y elegancia no están reñidas.

Con una audiencia del 19,5% y más de 2 millores de espectadores, en esta edición la naturalidad de sus aspirantes conquista corazones y en las redes se nota. El hashtag oficial #MCCelebrity logró colocarse en lo más alto de las tendencias en España. Y una noche más estuvimos presentes en un programa, cuyo éxito cocinado a fuego lento sabe mejor.

Tras enfrentarse en la subasta, todo un clásico del talent culinario que triunfa las noches de los miércoles, los aspirantes cocinaron un plato de la mano de Patricia Montero, finalista de la segunda edición.

Un formato de éxito como MasterChef Celebrity no podía dejar pasar la oportunidad de dejarse envolver por la inocencia y la sinceridad que desprenden los niños. Para ello se trasladaron al Colegio Público Federico García Lorca de Madrid. Cien alumnos, trece aspirantes y un menú saludable. María Kindelán, nutricionista especializada en Alimentación Consciente y Cocina Energética nos dio unos cuantos consejos nutricionales para los más pequeños de la casa.

Jordi Cruz se puso la chaquetilla para cocinar junto a los aspirantes. Un reto donde estuvieron aconsejados por Ricard Camarena, chef con dos estrellas Michelín. Una velada de lo más reñida, donde Miguel Ángel Rodríguez “El Sevilla” se convirtió en el tercer eliminado del talent producido por Shine Iberia para RTVE.

El cantante dijo sentirse superado por el programa que, aunque divertido, acumula mucha tensión y competitividad. La esencia de la vida es ver un final como el principio de algo mejor porque, aunque a veces no se gana, siempre se aprende.