La leyenda del cortador de bambú y la princesa de la luna.
La obra anónima que inaugura la larga y rica historia de la literatura de ficción en Japón, y una de sus leyendas más antiguas. Una historia fascinante sobre la belleza, la pertenencia y el amor.
Cuando contemplamos los tallos de bambú, evocamos Japón. Sus exuberantes bosques de tallos verdes tocando el cielo y el viento susurrando entre las cañas con un rumor indescriptible, un sonido hueco, de madera golpeando madera.
El bambú se usa desde hace miles de años por ser una planta con unas propiedades increíbles. Fuerte, flexible y versátil, no requiere de pesticidas ni herbicidas y sólo precisa agua de lluvia para crecer. Se auto-repone por sí mismo y la producción de oxígeno es un 35% superior a la de los árboles.
El diseño de interiores es una forma más de contar una historia, y la atmósfera mágica de los frondosos bosques de bambú vislumbra alentadoras perspectivas en diseño. Vivimos en un planeta extraordinariamente bello y podemos crear escenarios de ensueño usando materiales sostenibles, reciclables y ecológicos.