Feel Wabi-Sabi… y el flujo irreversible de la vida.
El “wabi-sabi” es imperceptible, pero está en todas partes. Es el reflejo de la luna en el mar o el sonido de la lluvia que cae. Es el ruido de una puerta que cruje o una grieta en una pared. O también es una taza deformada o un viejo jarrón amarilleado por el tiempo…
Una filosofía sensible, aplicable tanto en objetos como en paisajes o seres humanos, que aprecia intuitivamente la belleza efímera del mundo y que refleja espiritualmente el flujo irreversible de la vida.
Omnipresente en la cultura japonesa, este concepto contribuye en nuestro bienestar y en nuestra realización personal dictándonos un camino sencillo, alejado de desilusiones y totalmente libre de artificios innecesarios.
Lograr “un estado wabi-sabi”, es apreciar las cosas como tal… Es aislarse de todo y llenar su alma de sensaciones positivas y provechosas.
Hagamos de nuestros interiores lugares mágicos y apacibles para desprendernos de las cosas más frívolas de la vida y alejarnos de todo lo ya establecido.
Interiores recluidos, cómodos, románticos… Simplemente espacios vibrantes que intensifican nuestra capacidad de reflexión y nos hacen sentir vivos.
Descubre en la nueva colección de mobiliario wabi-sabi de Francisco Segarra, el lado más espiritual y sensacional de la decoración de interiores.
