Bonita y de lo más creativa… Así es la decoración de la barbería CROONER.

Los establecimientos del sector del estilismo siguen de cerca las modas y las tendencias que rigen la sociedad. La creatividad y la innovación son sus pilares; dos virtudes que tienen que saber manifestar de forma continua.

Además de las habilidades obvias de sus profesionales, el diseño de interiores es algo esencial para realzar la imagen de estos negocios. Centros estéticos, peluquerías, barberías… En ellos, el estilo lo es todo y la decoración, la mejor vía para poder expresarlo en todos sus aspectos.

A través de un interiorismo vintage con toques más actuales, la barbería CROONER luce bonita y flamante desde la misma sala de espera. Un espacio acorde con los tiempos pero que no dejar de honrar la cultura y la tradición de un oficio milenario.

CROONER. Un precioso giro en la decoración de barberías.

Con el auge de las culturas y modas urbanas, las barberías han experimentado un renacimiento fulgurante. Templo esencialmente varonil, también demuestra el fuerte interés por el cuidado estético masculino.

Con la intención de perpetuar la esencia de un pequeño comercio tradicional, CROONER abre sus puertas en la ciudad de Oviedo, presentándose como un auténtico espacio de bienestar personal y social.

Porque ir a la barbería es un poco eso: cuidar de uno mismo, simpatizar y salir con un look totalmente renovado. Es un momento de placer que se ve claramente acrecentado por el ambiente que se respira en el espacio.

Aquí, los cortes de pelo y los ajustes de barba se viven en un lugar agradable, propicio al descanso y conscientemente diseñado para que la experiencia sea inolvidable.

Llevado a cabo por el estudio de interiorismo Juan Noval Studio, la decoración de esta barbería derrocha mucho genio y carácter. Sillas de cuero, muy de barberos; azulejo de terrazo, muy vintage; y luces cálidas para darle un giro moderno de lo más acertado.

Una sala de espera que lo dice todo.

Innovador y funcional. Así podríamos calificar el interiorismo realizado en CROONER. Desde la mismísima entrada, podemos apreciar el confort y la tranquilidad que se palpan en este pequeño local de la capital asturiana.

Tomamos cita, acudimos, entramos y nos acomodamos en una sala de espera que lo dice todo. Acondicionada con los sillones contract del catálogo de Francisco Segarra, es la antesala perfecta de lo que está por venir.

En terciopelo y con un diseño minimalista, estas dos piezas aportan un toque elegante y muy atractivo. Un tanto retro, un tanto sofisticadas… Las mejores butacas de sala de espera para que los usuarios sientan la armonía que reina en el conjunto del local.

Aquí, todo fluye y el estilo manda por encima de todo. Un precioso ejemplo de cómo decorar una barbería con todo el impulso creativo e innovador que necesita este tipo de negocio tradicional.


Proyecto de barbería: CROONER.
Decoración de barberías: Estudio de interiorismo Juan Noval Studio.
Mobiliario para sala de espera: Sillones Kensal de Francisco Segarra.
Fotografía: Erika Anes.