Decoración de jardines con un encanto entrañable y cautivador.

Hay cierta estética nostálgica en los muebles antiguos. Una belleza inusual y fascinante que este verano Francisco Segarra te invita a incorporar a tus espacios al aire libre.

El mobiliario de exterior debe ser cómodo, útil, de gran calidad y con cierto atractivo. Pero quizás, en alguna ocasión, deseamos encontrar algo más… Algo que nos conecte con nuestro pasado y nos despierte bonitos sentimientos.

Ese encanto entrañable que transmiten algunas decoraciones de jardines es lo que las hace únicas. Esa magia capaz de generar una estampa tan admirable como la sencillez primitiva y la elegancia natural de unas sillas antiguas. Ver cómo se armonizan en un paisaje cualquiera de nuestro alrededor aportando ternura y espontaneidad.

Rincones para conservar la esencia y el encanto de un mueble antiguo.

El verano es una estación para disfrutar de nuestros exteriores, para contemplar la belleza de la naturaleza y para vivir en plenitud.

Momento de valorar lo vivido y, con ello, enriquecer nuestra experiencia y sentirnos más poderosos para emprender nuevos caminos.

Nuestros espacios exteriores se visten para alegrar nuestros días y embellecer nuestras noches. Todo a punto para renovar energías y fortalecer nuestras raíces.

Terrazas, patios, jardines… en sus rincones también existe espacio para esas piezas que conservan la esencia de lo que fueron y que hoy aún siguen mostrando su encanto a través de ella.

Resguardados pero libres, como nuestros recuerdos. Muebles antiguos que quieren llenar de calidez y delicadeza nuestros exteriores y por ello en Francisco Segarra siempre les concedemos un lugar especial.

Un diseño discreto, un color atrevido…

Recuperando el valor de lo imperfecto, preservando sus miles de historias y apreciando su actualizada utilidad, nuestro catálogo de muebles antiguos está repleto de piezas capaces de motivar tu imaginación y convertirse en elementos protagonistas de tu proyecto de diseño.

Cierta estética nostálgica y un tanto audaz se desprende de unas sencillas sillas antiguas de madera. Un diseño discreto, un color atrevido… la pátina de la superficie une dos características fundamentales que hacen de esta silla un modelo especial que hoy se une a nuestro verano.

Nuestros espacios al aire libre se viven intensamente durante la época estival y los muebles de exterior acaparan todo el protagonismo, pero para aquellos que buscan ese encanto que sólo las piezas antiguas llevan en su interior, descubrimos cómo es posible incorporarlos sin perder su ternura y autenticidad.